Caliche

Para obtener nitrato de sodio, la extracción primaria de caliche en la mina se realiza mediante voladura, seguida de extracción mecánica para separar toneladas de tierra y roca. En María Elena, Nueva Victoria y Pampa Blanca, el mineral se lixivia en pilas, obteniendo soluciones destinadas principalmente a la producción de yodo. Luego, las soluciones son transportadas a estanques de evaporación solar donde las sales cristalizan con altas concentraciones de nitrato. Es entonces cuando se transportan en camión a las plantas de Coya Sur, donde se utilizan en el proceso de producción de nitrato de potasio.

Salmueras

Las salmueras, presentes en forma concentrada en las grietas debajo de la superficie del Salar de Atacama, se extraen de los pozos de bombeo estratégicamente situados en varios sectores del Salar. Después de ser extraídas, las salmueras se bombean a enormes pozas de evaporación. Allí descansan bajo el sol del desierto para aumentar su concentración. La tasa de evaporación aquí es muy alta: alrededor de 10 litros por metro cuadrado por día. La concentración se monitorea permanentemente en cada uno de los estanques. Tras la evaporación, las salmueras restantes se bombean y la sal se recoge.

Después de una serie de instancias de evaporación, una parte de la salmuera bombeada se recupera en la forma de solución concentrada de cloruro de litio, un subproducto del cloruro de potasio. Otra parte de la salmuera ya concentrada se reinyecta en los depósitos de sal subterráneos del Salar de Atacama. Las sales depositadas en las pozas de evaporación se recogen y transportan de manera apropiada y luego, después de los procesos de trituración, flotación de espuma, secado y compactado, se obtienen cloruro de potasio, sulfato de potasio y ácido bórico.

El caliche es un mineral que contiene altas concentraciones de nitrato, yodo y, en menor medida, potasio. El caliche se encuentra en capas o venas que tienen un grosor de entre 20 cm y 5 metros, y que están cubiertas por una capa superficial estéril y poco profunda que puede tener un espesor de entre medio metro y 1,5 metros. Los pueblos originarios conocieron la utilidad del caliche por largo tiempo, y se sabe que, durante la conquista española en el siglo XVII, este mineral fue empleado como fertilizante agrícola. Caliche proviene de la palabra quechua “cachi” que significa sal.

A principios del siglo XIX, comenzaron las primeras formas de explotación del caliche en las llamadas “paradas”, que eran pequeños asentamientos de personas en medio del desierto en áreas donde se encontraba el mineral. Solos, o en grupo y premunidos de palas, estos pioneros extraían el mineral, en un proceso artesanal que, luego del auge de la industria que siguió al primer envío a Europa en 1830, se desarrolló hasta convertirse en oficinas grandes e industrializadas. (más de 300 entre 1880 y 1996). La única planta aún en pie es la Oficina María Elena, bautizada así a partir del nombre de Mary Ellen Condon, la esposa del primer gerente de esa planta, Elías Cappelen-Smith.

Construida en terrenos comprados al gobierno chileno en 1924, la planta de Maria Elena fue inaugurada en 1926. Entonces, fue equipada con el sistema de extracción de salitre patentado por los hermanos Guggenheim, que reemplazó al sistema Shanks. Junto con la antigua oficina Pedro de Valdivia, construida en 1931, fue la mayor operación extractiva de salitre del Desierto de Atacama, con una capacidad de producción combinada (ambas oficinas) que excedía el millón de toneladas por año.

En el contexto de la economía global actual, tenemos un nuevo enfoque para la explotación del caliche. Este recurso, junto con las salmueras del Salar de Atacama, son vitales para el desarrollo nacional y mundial. Para SQM, que es hoy el heredero de esta gran industria, estos recursos naturales son esenciales en la elaboración de los mejores productos y servicios para sus clientes. Por ello, en SQM desarrollamos e implementamos continuamente nuevos procesos, empleando las tecnologías más avanzadas, y generando soluciones innovadoras para maximizar los recursos disponibles mediante operaciones sostenibles y eficientes.

Estamos celebrando los 50 años de SQM. Un período en el cual hemos trabajado con energía, constancia y dedicación teniendo siempre como meta la excelencia. Nuestro objetivo ha sido, y es, entregar a nuestros clientes lo mejor de nosotros; nuestra mejor cosecha. Durante medio siglo, hemos desarrollado productos únicos, contribuyendo, mediante una excelente nutrición vegetal, a mejorar la agricultura en muchos países del mundo. Estamos comprometidos con un futuro sólido; con nuevas contribuciones que traspasen fronteras, y a trabajar constantemente en tecnologías innovadoras para el crecimiento sostenible de los cultivos en todo el planeta.

En 1930, el gobierno chileno creó la “Compañía de Salitre de Chile”, COSACH, cuyos propietarios fueron el Estado chileno con el 50%, y las empresas privadas que aún usaban el sistema Shanks (37 empresas) que poseían el 50% restante. Debido a sus malos resultados, COSACH fue liquidada en 1933 y reemplazada por la Corporación de Ventas de Salitre y Yodo de Chile (COVENSA), a la cual se incorporaron empresas que utilizaban el método Guggenheim: Anglo-Chilean Saltpeter Company y Lautaro Nitrate Company, lo que significó cambios importantes en la concesión y la explotación de nitratos. En 1968, Anglo-Lautaro pasó a ser parte de la “Sociedad Química y Minera de Chile”, actualmente conocida como SQM.